El camachuelo común

Nido de alfarero, Trepador ?
Interior de la tumba de Klitemnestra
Micenas. Peloponeso.
Grecia 2009

´La curruca sarda/ la curruca libre/ la curruca parda/...`.

Me dice mi amigo Pepe Pyrrhúla, el Picabrotos, minero, pikador hermétiko y psilicoso, especialista en canoras y otras sidras, hierbas quería decir, gran forofo de Fernando Alonso, como el Capi del Teach, que me acaba de agregar a sus favoritos, para echar unas risas ya que no puede echarme un culete y, sobre todo, vigilar mis frecuentes meteduras de pata en cualquier pantano o patatal que se me cruce.

¡Venga tío, dale caña a esos cabrones!

¿A quién?

¡A quién va a ser, joder, a los banqueros!

Y se ríe como si en lugar de risa tuviese un trueno en el pecho, una tormenta, que acaba reventando en una tos inconcebible. No puedo con él.

Cuando se calma promete ejercer para mí de kogonera en asuntos de su competencia,  pero en privado porque prefiere el silencio y la umbría (sin h) de los valles de la Marea, a la escandalera de la red y el claror de las pantallas, ¡y los pájaros libres a los enjaulados! y, sin solución de continuidad, me echa una cantarada por teléfono, na más que pa jodeme, porque me deja aún más ruinucu y encoyíu pola emoción, como una curruquina temblona en la cocina.

¡Pa cuando una botellina sidra, piculina!, me grita pa sacáme der pasmo antes de colgar. ¡Qué hombrako, Déu méu!

Saludos.

El camachuelo trompetero.