viernes, 30 de septiembre de 2011

Grafitis -3


Comencé esta pequeña serie de artículos por una crónica del Capi del Teach, en Desde la popa (9-07-2011. De Koroni a Kalamata). Afeaba allí Alberto la conducta de unos gamberros metidos a grafiteros, que habían pintarrajeado viejas máquinas y vagones en un museo del ferrocarril al aire libre en Kalamata, en el Peloponeso, apoyando sus palabras con fotografías de la guarrada.

Hice un comentario ese día que no me dejó muy agusto porque parecía dar a entender que estaba contra los grafiteros en masa, sin muchas explicaciones. Yo había empezado ya a reducir el número y tamaño de mis aportaciones en el blog y el comentario desfavorable iba dirigido a los vándalos, pero desde entonces quise deshacer el posible entuerto o malentendido, con amplitud. No me quitaba el sueño aunque estaba en capilla. Cerrar ventanas para abrir otras, que no haya demasiada corriente ni atmósfera viciada, estancada. Cuestión de método y un poco de memoria.

Las obsesiones y el gusto por el tema hacen el resto. Uno es esclavo de lo que escribe pero se puede ampliar, aclarar y rectificar. Lo escrito hace daño, es uno de los riesgos que se asumen,  por eso a veces pido disculpas aunque nadie las haya solicitado. No conseguiré gran cosa, pero me quedo más tranquilo. Los jodidos fariseos hicieron bien su trabajo.  Propósito de enmienda, dolor de corazón, dicir los pecados al confesor, cumplir la penitencia y toda la pesca liminar.

Akadimias, Atenas 2011


Aconsejaba a los grafiteros en aquel comentario abrazar la profesión de rotulista y, si tenían algo que dicir,  seguir trabajando hasta encontrar una salida, que llegaría.
¡Muy guapo!, si fuera tan sencillo. ¿Dónde pintar?. Apenas hay dinero para lo fundamental, ¿de dónde sacamos para telas, tablas, marcos, colores?. ¿Dónde están las paredes para ensayar e ir creciendo sin alevosía ni nocturnidad?.

No estoy de acuerdo con los indeseables que empuercan lo que no pueden superar, lo que se les escapa, impotentes, pero apoyo a quienes trabajan por superarse a sí mismos, al que afina su oficio o su arte contra todas las dificultades.

Prohibimos pero no damos soluciones.

El ferrocarril y sus aledaños siempre fueron lugares favoritos de los grafiteros, porque la caja de hormigón de las vías, túneles, paredes, casetas o dependencias abandonadas dan mucho juego y las estaciones son lugares solitarios cuando no hay tráfico ferroviario, y con frecuencia están en los márgenes de las poblaciones, sin mucha vigilancia.

Es frecuente ver trenes pintados como para un circo y vagones jipis camino de la costa oeste. Y con ganao asomando y  muuuuúúhiendo  ya es la rehostia estética west-country  Grateful San Fransisco Dead (California), camino de Venta de Baños (Palencia), o Santasmartas (León), que tiene tren pero no tiene tranvía. Pero la mayoría son vehículos abandonados en vías muertas, ferroñosos, que las propias empresas parecen esperar que se pudran mientras afean los barrios más humildes.
O mercancías que sólo conocen el óxido, el negro y la mugre, que parecen esclavos encadenados y da pena velos atravesando esa terrible estepa castellana, todo su horizonte polvo, sudor y hierro. El gris nacional. No hay apenas lugar para la belleza en esas reatas de vagones, en esas cuerdas de presos clónicos sin Quijote que los libere.

´Vista de gris/ la moda del país/ y no se meta el dedo en la nariz`, cantaba Moncho Alpuente en clave cabaretera en tiempos pregrafiteros. Unas gotas de color pueden levantar un poco el ánimo a los condenados. Pero no les echemos un caldero de pintura encima que está cara y contamina. Esta  sobredosis pictórica es propia de la juventud, hay que disculparla casi siempre como el sarpullido o prurito primaveral que es.Y la saturación se debe también a la falta de medios o, más exactamente, al hacinamiento de pintores y a la escasez de paredes. Medio en broma, medio en serio.

El caso que cuenta el Capi es el de un museo del ferrocarril donde se han conseguido rescatar elementos del medio de transporte que van desde la locomotora al siblatu del jefe de estación, en unas condiciones de conservación que no siempre es posible lograr, aunque en alguna foto tampoco se ve una exposición ejemplar. No parece que las autoridades se caractericen por un cuidado exquisito de lo público, porque algunos vagones emporcados están también tan caquécticos que más que un museo pareciera un depósito de cadáveres.
Pero en definitiva la gochada pseudografitera es una agresión, un atentado al bien común y como tal delictivo. Lo menos que se les debería exigir a los astistas sería que limpiasen lo que ensuciaron y más pa con ello. Y si no hay remedio que trabajen para la comunidad hasta saldar el estropicio. Mantidos, pero racionándoles el chocolate a una onza por día.

Currar por el común es lo que deberían estar haciendo, antes que nadie, todos los banqueros y especuladores que provocaron la crisis, a pan y agua, sin postre y en el recreo cara a la paré. ¡Con todo su morrazo no paran de pidir sacrificios a la gente que ya pagamos el puto pato sin comelo ni bebelo!.

Seguiremos. Salud, yasas.

Barbarómiros.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Grafitis -2


Algunos grupos de grafiteros, asociados a movimientos  marginales, de barrios, okupas y antisistema, bastante politizados, tienen como objetivos intereses más importantes, los bancos, las grandes empresas, las propiedades de la burguesía. Estos son los más peligrosos y cercanos ideológicamente a los autores de pintadas políticas, y a los que más se persigue, al margen de su civismo o incivismo real.

Síndagma. El marco, mármol del Penteli
Atenas 2011

Y después está la delincuencia del grafiti, gente que lo mismo pinta un monigote en la Catedral de León, estampa su firma debajo de Velázquez o le da una mano de albayalde a la Capilla Sixtina, si la dejaran.
Este género es el que casi todo el mundo desaprueba con razones de peso que no pueden operar en individuos descerebrados. Pero por esta especie se juzga al resto y esa es la imagen que al poder le interesa airear, para controlarlos mejor a todos, en especial a los más capaces no a los más bárbaros. Y siempre se puede justificar la mano dura, e indiscriminada, cuando interese, frente a la opinión pública.

Hay una foto en el otro blog de un Faro en el Sarónico en el que se ve el grafiti de un chambón que tiene menos estilo quer Botineh desfilando en la Pasarela Cibeles con liguero, sostén de la Secret y plataformas de reinona. El faro es una cocada, hecho de piedra tallada, pequeño y muy bien conservado, parece un castillín de juguete. El jodido pintamonas se limpió el culo en las paredes y menos mal que no acabó el trabajo. ¡Coño, píntate los huevos que son un par y con dos colores, sin complicarte la vida, lo resuelves! Utiliza dos complementarios, a menos que tengas uno atrófico, el huevo no el color, en cuyo caso deberás cargar el tono del normal para compensar pesos y equilibrar. Así quedarás en paz con Dios y la Armonía  Universal.

Son los mismos que también pisan los trabajos de sus mejores colegas, de los que deberían aprender y a los que envidian letra y música. El cainismo hupano. Porque ellos, como mucho, sólo pueden ofrecer un exhabrupto pictórico, léase cagada. En fin, los más torpes del oficio, los que no tienen nada que decir y ni siquiera son capaces de firmar con elegancia, porque tampoco negaremos la belleza de algunas firmas.

El medio y hasta la firma es el mensaje, y se puede colorear muy estilosa e incluso artísticamente. Por eso no se trata sólo de mensaje sí o no. Es posible hacer una obra de arte con letras, y la abstración rompió con el significado verosimil inmediato de la figura o el paisaje. Los colores y las formas se independizaron de la realidad más mostrenca, y sin embargo el abstracto no ha dejado de crear desde su ruptura con la tradición, o su deriva. Lo digo porque alguna vez oí criticar el que algunos sólo sepan pintar letras, como haría un rotulista profesional que no se las da de astista. De acuerdo. A muchos les interesaría integrarse en profesiones así, muy dignas, y serían buenos, ¡si encuentran curro!.

Síndagma, Atenas 2011

La belleza de algunas obras al aire libre de grafiteros anónimos o conocidos sólo en el mundillo, es innegable. Murales  paisajísticos, figurativos, abstractos, con letras como base,  con lujo de colores o seleccionando gamas. Hay algo más que conocimiento y dominio del oficio, y eso por sí sólo ya es mucho.
Haríamos bien en mimar a estos jóvenes, que mientras trabajan,  pintan y aprenden no se endrogan, como a otros talentos más que esta sociedad margina cuando no reprime.

Seguiremos. Yasas, salud

Barbarómiros.

P.D. Hablando de estilo, recordé la ponencia acerca de ello de un Miguel Anxo, escritor gallego, en un Festival de Cine de Galicia, en Carballiño. Hace  muchos años. Además de relacionar etimológicamente estilo y estilete, siendo el estilo la marca profunda, personal, que uno dejaría en lo que hace y el rasgo que la vida ha impreso en nosotros, trató también de los tatuajes, la escritura, el dibujo, la pintura del estilete en la piel. El colmo del estilo, grabado en la carne. Me traía a la memoria la letra con sangre entra de la vieja escuela. Algo cercano a una cicatriz íntima que nos hace únicos y reconocibles. Una huella. Estamos hablando, pues, todo el tiempo de dibujo, rasgo, grafiti, texto, pintura, o firma. Y de esta como estilo y  mensaje.  Vale.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

Grafitis


El Muro cayó y se subastó a pedazos entre mercaderes mientras se proyectaban otros tan vergonzosos. La rabia de raperos y grafiteros puede renovarse.
Y así, en muchas barriadas del mundo, los chavaletes que se inician siguen entrenándose en los descampados, en las paredes que aislan las vías del ferrocarril, en los muros de las autopistas, en puentes y túneles o en edificios semiderruidos y fábricas del extrarradio; en algunos lugares ya no es posible encontrar un espacio disponible para pintar.

Akadimias, Atenas 2011

Los bajos abandonados llenos de basura de muchas viviendas en uso, en especial de los arrabales de ciudades grandes  y pequeñas, esconden a veces agradables sorpresas y alguna maravilla. Pero los mejores objetivos, como la tentadora pared blanca de un banco, suelen estar en el centro, más vigilado. Sólo los osados se aventuran. No todos renuncian a la filiación antiburguesa de sus ideas. Porque no se trata sólo de pedir un espacio para pintar, hay una crítica seria al statu quo político, social y artístico.

En origen el movimiento, llamémoslo asín, viene acompañado de una fuerte carga política en forma de denuncia de las condiciones de marginalidad de los barrios, paro, pobreza, abandono, violencia, alcoholismo y otras drogadiciones y miserias. La crítica al poder era, y es, una constante del rap más radical.

El grafiti camina la misma senda. Desde ese punto de vista, y hasta aquí, no se diferencia mucho de la pintada política, salvo en una cosa: en el lujo.
Ya los jipis adornaron con todo tipo de floripondios las letras haciéndolas flotar en el espacio y bailar la danza de los 7 velos, como el humo del chibuquí de don Ramón. Lo suyo no es psicodelia, pero también hay puntos de unión. Algunos modelos de letra del grafiti me recuerdan cosas de Crumb, o de un dibujante nuestro, de caras y coches distorsionados, fantásticos, Calonge. No sé exactamente porqué. ¿Tiene algún parentesco este Calonge con la mujer del asturiano Mariano Antolín Rato, escritor psicodélico donde los haya?
Y sí, hay que reconocer que los chavales se lo curran.

Conviene hacer un leve inciso para llamar la atención del querido lector sobre las diferencias y confluencias del muralismo y el grafiti que todos podemos, más o menos, calibrar. Comparten y acotan territorios difíciles de delimitar a veces.


Aparcamiento al aire libre en Botasi
Exarjía, Atenas 2011

El grafiti, decía, viene a ser la pintada lujosa, llevada a la categoria artística, en su parte formal, sobre todo. Ambos lenguajes coexisten cumpliendo sus cometidos. Como tales los incluí en Alfabetos, aunque dormirían bien en Pindura, en especial las fotos.

El arte de la pintada clásica estaba en el mensaje, y en esto se epecializaron los del 68,  no en la belleza de las letras. Tiene que ver con la literatura. El grafiti decora y hermosea, es más pinturero. Se me objetará que no hay nada más bello que una frase linda. Vale.
No es que esté muy a favor de la decoración cuando el marco natural no la pide, pero el marco que suelen usar los grafiteros está tan degradado que cualquier mano  de pintura lo favorece.
En muchos casos las pinturas, porque de eso se trata, murales, viñetas, grafitis o pintadas, son  casi la única cosa que merece antención, que alegra la vista, el resto, el soporte y el entorno, es deprimente.

Sería un avance no sólo permitir que pintaran, sino facilitarles los medios, las pinturas, las paredes, y pagarles el trabajo, por supuesto. Sé que se ha hecho en muchos sitios y con resultados óptimos, pero sigue siendo más frecuente el olvido o una cierta inquina, cuando no una sañuda persecución contra ellos.

A nadie interesa más que al poder que en ese "ellos" entren todos, los gamberros que atentan contra el patrimonio arquitectónico o histórico, contra el mobiliario urbano o la propiedad privada en general, y los artistas de verdad, que los hay,  probablemente tan contestatarios e inadaptados como los otros. Le interesa porque no le gustan los primeros, los cafres, pero mucho menos los segundos.

Seguiremos. Yasas, salud.

Barbarómiros.

martes, 27 de septiembre de 2011

Pintadas


Mi generación, y alguna más, creció con las pintadas del mayo francés del 68 e hizo la mili en los últimos años de Franco o en los primeros de la democracia. Vivimos el reinado de la pintada de la transición por excelencia, Amnistía y Libertad. Era una de las formas de protesta contra un sistema caduco y contra otro dictatorial, respectivamente.

Hay especialistas que tratan el tema y las pintadas no son de ahora. Se han encontrado en el interior de las pirámides, con caracteres geroglíficos, en los restos de un palacio asirio, en el ágora ateniense, en el foro romano y en el friso o la columna de un templo antiguo: El Faraón ni está ni se le espera, Asurbanipal la tiene corta, A Sócrates le va la marcha, Publio ama a Porcia o Byron estuvo aquí.


Plaka, Atenas 2011

Aparte de estas curiosidades históricas, reales o apócrifas, la pintada política se desarrolló en paralelo a la revolución industrial y conoció su apogeo con el auge del movimiento obrero. Las luchas nacionales, de independencia y las guerras coloniales fueron otros tantos caldos de cultivo  de este recurso de la acción directa y clandestina, en los siglos XIX y XX.

El contenido revolucionario o reivindicativo de las pintadas iba desde el netamente político de carácter universal, como Libertad, hasta el más localista y abstruso, Antonio, cabezón, saca las ovejas del salón, por ejemplo. Y de la broma de una noche de verano a jugarse la vida y, en algunos casos, perderla. Hay ejemplos estúpidos y trágicos en todo el mundo.  Por una simple frase idealista.
Recuerdo la pintada que da título a la traducción de la novela de Kazantzaki al castellano, El kapitán Mijalis, Libertad o muerte, que era todo un símbolo en un momento dramático en la lucha de Creta por su independencia de Turquía y que es también la clave de una de las historias más bonitas del libro.
Y las anticolonialistas de Argelia o las antiimperialistas de la propia América, la del norte y la latina.

Estábamos escuchando a Sisa y a Pau Riba, a Triana y a Kiko Veneno, después el Jim Dinamita de los Burning de la Elipa, al Morfi de la Banda Trapera del río, Besós?, y al rey del pollo frito, ¿dónde nació Ramoncín, Chamberí, Lavapiés...?, la primera generación del punk nasional. Luego vendrían Kaka de Luxe, Siniestro Total, Derribos Arias, Parálisis Permanente o Tapones Visente.

Escuchábabos bucha búsica porque érabos bás jóvenes y había una gran bovida, cobo ya se sabe.

Akadimias, Atenas 2011

Y en esto llegó el rap y las pintadas se llenaron de color. Los violadores del verso callejero, junto a sus bailes, sus pinturas y sus ropas holgadas. La cosa sigue y ahora es, además, un estilo, una moda y una línea de diseño para consumo de sus seguidores y forofos, que enseñan el raigañu´l´cul por prescripción facultativa. ¡Más cornás dan Alcatráz o Sing Sing!.

Ha quedado una buena música, que continúa en pie viva y atenta a la realidad y un estilo pictórico reconocible, también en activo, que ya forma parte del paisaje, entre otras cosas porque se expone gratis al aire libre.
Después de treinta años el grafiti ya entró en los museos y el Muro de Berlín se vendió a cachos, como memoria, como obra de arte o souvenir de coleccionistas millonarios. Pero los muros no desaparecieron y siguen levantándose otros nuevos. ¡Más pintura, esto es la guerra!

Ese sería un posible texto para una pintada parisina, cada loco con su tema.

Seguiremos. Salud.

Barbarómiros.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Demonios auténticos


Síndagma, Atenas 2011

No sabía a quién endosarle esta cosa tan fea, er mihmo Zataná, Príncipe de los extreñidos mentales, pero como son de su banda se lo voy a adjudicar al Botines y al Fatzinger mientras no encuentre algo peor.
No tengo tiempo hoy para más y de paso introduzco el asunto que quisiera tocar en breve, grafitis y pintadas.

El dibujo, sobre mármol pentélico, tan expresionista como flojo a mi juicio, está en la plaza de Síndagma, el centro de Atenas, escenario de endemoniadas cargas  policiales frente al democrático Parlamento nacional.


Tripes. Edó. Aquí.



Salud, yasas!.

Skylorómiros.

domingo, 25 de septiembre de 2011

Diskolia teologicofinanciera


Salchichón salmantino de Sartasden
Kulares Bodegas Milio er Botinehi
(División teológika)

Comenté que los culares podían dar mucho jugo, zumo de culo le llama la escatología popular, pero yo tengo la sensación de andar algo extreñido y extraviado en esto. No acabo de encontrar el lubricante, y el lubricio, que sin duda tiene el tema.

No se me escapan ciertas ano-logías que ya he sugerido o, directamente, penetrado sin contemplaciones, como los kulos del kolokapitalismo ferox, lupus lupus, Milito "Lacrisismelasuda" er Botine y compañía, cada uno de los cuales caga más que mil currantes.
Ya dijimos que los culares son los chorizos más lucidos, dilatados y diverticulosos del embutido patrio. Tanto recoveco guarda auténticos tesoros de la hez porcina. Y en tiempos reculantes sacan a la palestra sus Reservas y Grandes reservas, enormes cazcarrias petrificadas ya en las bodegas más ocultas y tenebrosas, inaccesibles a la marea diarréica cotidiana del común de los mortales.
Trufas gigantescas que nos comemos todos en finas lochas como jamón de bellota. En finas y en gruesas, no importa, que lo substancial es tragarlas. Pura mojama culera.

Después está el tema del transporte y reciclaje de curruscos tan desproporcionados y duros de roer. Si cada cual cargara con su pastelón algunos se precintaban el culo. O compraban la cuota de bosta ajena para que fueran otros los que se pusieran el tapón, que son culares pero no tontos, sólo del culo.

Otros que tal bailan y  la cagan, como no podía ser de otra manera, que Dios los cría y ellos se juntan, son los jerarcas eclesiales.
¡Hay que ver lo que caga el señor obispo!, le comentaba en voz baja su criada monja a una colega en el descanso del jueves, después del santo rosario.
¡Es de admirar la color del cardenal, del purpurado, amoratado por el esfuerzo de un zurullón catedralicio que se resiste a comparecer!, añadimos nosotros sin rubor alguno.
Fisiología obliga y nos iguala ante el Altísimo y ante los hombres, no en el tamaño de las cagadas, que cada uno depone según la envergadura de su bandullo y de su puto kolo, metafóricamente hablando. En cuatro palabras, no democraticemos la bosta.

¿Y que dicir del benedictus pater sanctus, el Gran Jefe de la Cuadrilla? Sí, el de la ropa cándida, alba, tintada de violetas como la coronada Atenas, reflejo del cárdeno rostro en el momento de aplicar a tope la prensa abdominal y el juego de esfínteres, ¡oh delicia de místico color sutil, en blanco paño de púrpura teñido!. Dejad que los niños se acerquen a mí que ya yooo...yo yaaaah!.

¿Qué tiene que ver esto con los culares?. Todo. El pasmo, el éxtasis que se experimenta cuando se resuelve una deposición dificultosa, la diskolia teológica y/o financiera, en un gran ano, un Gran Cular como los arriba mencionados, los mayores chorizos del mercao, recodemóslo, es comparable a una visión del paraíso: los colores brillan y se independizan, se abren los tapones de los oídos a la par que el del culo y las entendederas, el acelerado corazón se relaja, el alma se serena, la vida resplandece como si todo fuera, una vez mais, nuevo, recién nacido. Un tripi.

¿Y el pueblo?. A menor escala sufre también idéntica ofuscación, tiene que agarrarse, ¡qué verbo tan grosero, Espe mía!, a los placeres humildes de cada día, casi no le queda otra. Sólo que en la masa el nirvana es agudo y pasajero, a los pobres tampoco les sobra tiempo para deleites retretiles, tienen que dar de comer a los suyos,  que dice Maqua, y siempre andan ligeros... de equipaje. Una puesta rápida, conónica y sumaria y a otra cosa, que hay que hacer cola en el paro y en cáritas diocesanas. Para muchos sólo cuenta ya el orujo, el usso, el aguardente, el tzikudiá, la grappa, el rakí, el pastís, el alcohol de quemar..., que son baratos y colocan más.

Y toda esa, postrera  e inaugural, iluminación rectomística se ofrece a nosotros en persona, en particular, como un milagro, nos sentimos rejuvenecidos en un mundo parthenos, por violar, por hacer.

¿¡Qué no harán Milito que ta lipá, a santa compaña, por repetir el viaje psicodélico?!.
Para colmo son extreñidos crónicos e incurables, cada puesta la convierten en un hito histórico y pueden  hacer muchas a diario, lo que no contradice su extreñimiento, tampoco el vital. Están colgaos de la Mítica Defecatoria y coleccionan millones como yo culares o un bebé fecalitos. ¡Hay que dales purgantes, a  su cargo, hasta que les baje el subidón!.

Y que se puedan recoger sus desperdicios enroscando una manguera al ojete para  que reciclen el caldo obtenido regando los jardines privados de sus humildes mansiones.
¡Que así sea!

Salud.

Candelario Eva Cuol.

sábado, 24 de septiembre de 2011

El desayuno de la piloñesa



Agii Apostoli
Eubea 2011

Al tomate, el feta y las olivas presentes y unidos en la mayoría de las comidas, se juntan  aquí el té, la tirópita, hojaldre relleno de queso, y un trozo de bizcocho bendecido de San Fanurio, Ayios Fanourios, la Fanourópita que hizo i kiría Stavrula, la señora Crucita, el 27 de agosto, en un desayuno y fotografia de la morena de mi copla.

Salud y buen provecho. Yasas que kalí órexi.

Barbarómiros.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Eleni Legaki



Eleni Legaki
Grecia, agosto 2011

El Nisiótiko,  la música de las islas, es uno de los estilos más importantes y que más se escuchan en Grecia puesto que es el preferido de los isleños, hay muchas y cada isla tiene sus músicos y sus particularidades. Pero comparten un cancionero común que es conocido por todos y con frecuencia coreado.

Podemos incluirlo en la música tradicional. Es un estilo participativo ligado al baile en corro abierto y a la fiesta popular, de ritmo muy vivo, ligero, independientemente de que algunos temas hablen de tragedias marineras. Melodía algo hipnótica y repetitiva para el oído occidental, contribuye a ello la estructura de la estrofa nisiótika, en general de cuatro versos donde el primer verso se repite en el tercero o cuarto, y el segundo lo mismo (abba/abab).
Los instrumentos más característicos son la lira o el violín, junto con alguna otra cuerda  pulsada  y percusión.
La tsabouna es una gaita más pequeña y rústica que las nuestras de las que hay distintos modelos y, según las islas o la región, cambia también el nombre -los pontios,  los macedonios y otros la usan y no son isleños-, pero no la escuchamos aquí. Sí había una guitarra eléctrica con las cuerdas y un pequeño teclado.

Eleni Legaki, sobrina de uno de los compositores de Nisiótica  más conocidos del último siglo e hija de una intérprete histórica es desde hace tiempo una  gran dama de las islas.

Fue un placer escucharla en el escenario popular de Agii Apostoli, preparado por los pescadores junto al puerto, celebrando la luna llena de agosto con su voz y una sardinada regada con blanco de Eubea, junto a sus músicos y dos voces femeninas más, siento no saber el nombre de todos ellos. Hubo incluso un contraste con un cantante más joven que nos regaló alguna versión de Malamas y varios zembékikos, para los poseidos.

¡Hay que ver lo que curran los músicos en Grecia! Y eso que son muy queridos por su público, o quizá sea por eso. Desde la diez de la noche que empezaron los corros de niños y niñas del pueblo, hasta las cinco de la mañana, dieron tres pases, todos ellos, incluída Eleni. Los músicos casi no tuvieron descanso y la mitad de la noche había dos cantantes sobre el escenario. En ningún momento el espacio para el baile estuvo ni siquiera mediado, siempre lleno y con frecuencia quedaba escaso, casi hasta el final de la fiesta. Agarrados de las manos girando en el círculo...abierto.


Eleni, yelasti, sonriente.
Agii Apostoli 2011

No quise marchar sin saludarla y cuando terminó su último pase me acerqué al escenario y la ayudé a bajar tendiéndole las manos. Cuando íbamos bajando sigá sigá, poco a poco por la muy empinada plataforma, yo culo atrás, me percaté de mi osadía. Los zapatos de Eleni sin ser estratosféricos tenían su buen tacón y yo había bebido vino dios al mundo. Casi no me atrevía a mirarla, aunque la tenía de frente y ella sonreía, no quería que se diera cuenta de mi verdadero estado. ¡El caballero español!... . Ella parecía confiada. Al llegar a tierra firme  sin contratiempos me dio las gracias, siempre sonriente, y yo paracaló!, ¡y respiré!. Bre, mastora, borrachuzo!

Gracias a ti, Eleni, por una noche de buena música y dáselas también a  todos los músicos que te acompañaron. Creo que al final de la katabasis, de la tensa bajada por mi parte,  no me quedaba resuello ya para hablar mucho. Filiá, besos!

Esa noche, ¿o fue la siguiente?, cuando volvía solo a casa por el camino paralelo a la playa pequeña, vi por última vez, junto a unas sabinas añosas, la figura escurrida y estrambótica de don Ramón Mª del Valle Inclán, con sombrero. Con la mano buena en lugar del bastón agarraba un chibuquí.

Yasas, salud!

Ramiro Rodríguez Prada.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Los buenos cuates


Antes que de Jorge Martínez y los Magníficos era mi intención hablar de los hermanos Auserón, porque los conocemos desde que empezaron con Radio Futura y hemos seguido viéndonos de vez en cuando y, además, porque nos gusta su música.
Pero tampoco Siniestro Total iban a ser los primeros hasta que se nos cruzaron inopinadamente en Carrizo de la Ribera, en una noche llena de aromas cannávicos e intestinales y, sin embargo, ocupan el primer lugar en la etiqueta.

No  importa,  no es cuestión de jerarquías, nos hemos divertido mucho con todos ellos, incluído el Púgar y algunos más, hemos saltado, bailado, nos hemos aprendido muchas de sus canciones y, todavía hoy, siguen entreteniéndonos, moviéndonos y haciéndonos reír y reflexionar.
A esto último también ayudaron Os Resentidos de  Antón Reixa.

Todos ellos, no pasaron por la música, vinieron para quedarse.
Los caracteriza una pasión profunda por lo musical, una cuidada escritura, fruto de su cultura, su sensibilidad y/o sus experiencias vitales, que va del absurdo al sarcasmo, pasando por el mensaje de cantautor, la ironía política, la tradición castellana, andaluza o gallega puesta al día, la canción de amor o la poesía sin etiquetas, en un soporte melódico rockero, pero no sólo, porque han tocado todos los palos: punk,  tango, blues, muñeira, salsa,  flamenco, soul,  rap...

Comparten otras características, son didácticos y dicharacheros  porque disfrutan con la palabra  que es su medio tanto como las notas musicales, pero tampoco son unos  parlaenvalde.
Son gente con personalidad propia perfectamente reconocible, un estilo personal que los identifica y mensajes bastante claros que no suelen ir con la corriente, aunque  cierto público los coree como himnos de una generación o de una manera de pensar.
Músicos leídos y vividos, y críticos, desde luego.

El hecho de que comparezcan hoy aquí no los convierte en miembros  de ninguna movida, ni colegas de una moda común concreta y pasajera. Repito, son músicos con vocación de permanencia, ya están en la memoria de algunos, pero siguen teniendo mucho que decir.

Salud y buena música.

Ramiro Rodríguez Prada.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Salí de la escuela siendo otro


Jorge y los Magníficos tocaron hora y cuarto en la plaza de la Catedral de Oviedo, en fiestas de san Mateo, el domingo 18, un repertorio de clásicos que iban de un rockabilero Rascayú al Popotitos y de Antonio Machín a Elvis Presley. Algunos estándares del blues negro y el rock americano, junto a los primeros italianos que desembarcaron aquí.

Jorge, un hombre cultivado, en una carcasa de matapijos, y eso que vestían todos traje reglamentario, como una orquesta de casino o de fiesta mayor, uniforme apropiado a una puesta en escena y un contenido musical camp, el culomoyao, digo, siempre tan didáctico, introducía las canciones con brevedad citando a los autores y situándolas en el contexto histórico, haciendo así, en el conjunto del concierto, un repaso musical y, a la par, pedagogía.

La cuidada dicción de Jorge contrasta con su patético intento de no resultar pedante o académico, utilizando el recurso de esa voz chulesca de rocker, no duro, seis pesetas, que siempre nos hace sonreír. Porque el truco descubre, más que oculta, una faceta de la personalidad que parece imposible en un tipo de su apariencia: la sencillez, llámalo humildad incluso si quieres. Respecto a esto creo recordar alguna frase de Diego Manrique, por aquellos años del Heil Hitler!, que muchos no entendían, calificándolo de macarra y poco menos que fascista, a tenor de sus proclamas. No niego que tal vez explotara también cierto macarrismo, pero no dudo que en él es pose y a poco que se mire se ve a un hombre sensible y sencillote, cabal, a un buen tipo que se oculta detrás de varios disfraces, el más fácil para él aunque imagino que no siempre el más rentable, con esa pinta de cowboy, es el de pistolero pendenciero, ahora dulcificao por los años y más sabio.

Grecia 2011

Y porqué no, uno se debe también a un cierto prototipo de rocker que siempre cultivó el gesto adusto y la provocación, la verdad que más como guiño que como amenaza. Pero depende del enemigo. Es un hombre politizado no un cazafans. Se trata de sacudirse los moscones más molestos y putear al burgués. Recordamos una conversación con él en Avilés, en plena época del punk nacional post Banda Trapera del Río, después de un concierto con los primeros Ilegales, cuando todavía no le habían robado aquella caja de truenos que pateaba en alguna de sus canciones, y nos gustaban a todos los Rezillos, que ya eran Rebillos, algo así como la galaxia más alejada de Machín, y escuchábamos ahora el Raskayú a lo Stray Cats, o así y, después de los años, nos sigue pareciendo un músico lúcido e imaginativo que sabe tras lo que anda y lo explica con brillantez de varias maneras.

Distintos palos. Bolero, guaracha, blues, son, rock; suelto y agarrao. Buena música para escuchar y bailar. Un xylófono, un contrabajo, un saxo que alterna con clarinete, la batería y las guitarras y voz de Jorge. Magníficos.
En el concierto estuvieron tan correctos que no tocaron ninguna de Ilegales, que hubiera cerrado otro círculo. Pero nos dejaron con la miel en los labios. Creemos que en el repertorio falta esa canción, habría sido el cierre perfecto para un bis que no existió. Hago una sugerencia por si Jorge lee esto, que la canción elegida sea  Revuelta juvenil en Mongolia, mi favorita de las suyas.

Y se fueron y nos fuimos, porque el público empezaba a comprimirse en la plaza para ver a Carlos Baute. Íbamos pensando en el agarrao de Juan Bautista Humet, al oído me decías Bésame mucho y yo a ti Toda una vida... . "Suenan las alarmas de las farmacias... no es buena manera de crecer".

Salud y buena música.

Ramiro Rodríguez Prada.

martes, 20 de septiembre de 2011

Choscos


El primo de Riesgo

El chosco es un cular típico de varios conceyos del occidente asturiano, con un 80% de cabecero de lomo y un 15% aprox. de lengua, sal, pimentón y ajo, embutido en ciego de cerdo y ahumado.
Sus características y los requisitos de elaboración que "le confieren su prestigio" se recogen en un Pliego de Condiciones que deben cumplir los choscos con pedigrí.

Ahí los ves, a todos los choscos de buena cepa y algún desgenerao, en la fila para matricularse y sacar el título e ingresar en el Colegio Profesional de Choscos, amparados ya por la ley.
Hasta aquí la realidad, ahora entramos en la metáfora y en la ano logía.
Con el Certificao en la mano da lo mismo lo que metas en la tripa B, en el Ciego, que por algo se llama así, que se lo pregunten a Milio Coné, que es chosco, tosco y chusco y sabe más que muchos de chorizos, carne embutida y grandes cagadores.

Ya lo hemos dicho: una palabra entre tosco y chusco. Un tosco sabemos lo que es, un Milito el Botines, v.g. Y un chusco era el bollo que comíamos en los cuarteles cuando hacíamos la mili. Se le llamba sargento chusquero al que había pasado muchos años en el cuartel comiendo chuscos hasta alcanzar ese grado, sin pasar por la academia básica.
Chusco es también el que tiene gracia, donaire y picardía, según la Academia.
Así que el chosco participa de alguna manera de todas estas características, es un poco tosco como Milio porque es carne de cerdo, animal impuro y gochón, y porque tiene una forma de cabeza de marciano reducida por los jíbaros que echa patrás.
El chosco asturiano, por el contrario, echa patrás sólo un momento que es tosco pero magro y sabroso.

Creo que nos vamos entendiendo.

Y es un poco chusco porque ajo y pimentón le dan gracia y donaire, y la picardía la pone el sargento que, después de tantos años entre furrieles, se las sabe todas de culares y demás.

Recientemente se ha lanzado al mercado aquí, con gran aparato publicitario, un chosco de la firma Casquerías Alvarez que triunfó entre los consumidores menos exigentes. Un producto que se vende por fresco y está más rancio que el tocín que sobró en la boda de la 1ª duquesa de Alba.
Y cuando está fresco, cosa rara, no hay lomo, sólo lengua y vísceras, entrañada.

Con los choscos también jugaban al rugby como en el Bierzo, especialmente en los conceyos más próximos a éste. Pero no se entocinaban como nosotros porque son menos grasientos. Además jugaban con los más curados y secos, y no tenían que cocerlos después del partido como nos pasaba en los pueblos bercianos, los comían así, curados. Más ricos y blandines con los patadones y aprietos del mach.
Nuestros  botillos también maceraban en el partido, pero tener que esperar despueeeeés a que cocieeeeeran...¡era una tortuuuuura!¡Dios, qué hambreeeeeeeeeeee!

Choscos y botillos han dado origen a varias expresiones de uso familiar, veamos un par sencillo.

¡Qué choscu yes!, pa indicar que tienes el cabezón más torpe del conceyu, que tas pa que t´echen a la olla el cocíu.

¡Quita pallá, botillo!, cuando estás enmedio como un pasmarote, estorbando, ocupando como el botillo toda la pota. Ésta me la decía mi abuela cariñosamente y no sería por gordo, que me veo ruinucu y arrugaucu como una morcillina, ¡o témpora, o mores!.

Seguiremos informando.

Yasas, salud!

Jamo el del Gorrín.



lunes, 19 de septiembre de 2011

Kolos


Culos en pompa

Tal vez convenga acotar un poco lo que entendemos aquí por chorizos culares, aparte de  los mostrencos rectales de Milito y los Kolokapitalistas*.

Ante todo hablamos de un embutido de carne magra o grasa, introducida en una tripa de calibre ancho o muy ancho, sobre manera en el ciego o el intestino grueso del marrano, de cualquier producto de la cabaña porcina en adobo de ajo, pimentón, orégano, sal y, ocasionalmente, pimienta negra en grano, que se cura al humo.
Milín no necesita leña de encina, tiene sopladores profesionales que le secan el zuruyo en el momento de la puesta.

Dicho lo cual, ¿en qué se diferencia de un chorizo normal?. Naturalmente en el grosor.
Un cular es un señor chorizo, por su envergadura ya ni es chorizo, es cular a secas, aunque rezume.  Comparte el nombre, todavía, con longanizas anoréxicas y ristras del cocido pero poco más tiene en común con ellas.
Los culares también se cuecen verdes, como algunos chorizos, frescos, con una curación corta.
El chosco asturiano y, en particular, los lomos culares se comen crudos porque no tienen huesos como el botillo, con un tiempo de curación medio, menos los de Milio que se pueden consumir todavía humeantes y sudorosos.

El lomo es un caso particular de cular magro que no se embute con la carne cortada o triturada y adobada, se adoba por fuera y se embute así.
En puridad los lomos no son chorizos culares porque no son chorizos, les falta esa cualidad de la carne picada o en trozos, pero sí son culares porque se introducen en una tripa de esa parte del intestino grueso, como dije.

Esto de las clasificaciones siempre plantea problemas.

Al chosco lo suelen acompañar las patatas cuando se consume cocido y al botillo, además, el repollo y unas tripas de sabadiego. Para aprovechar un poco el caldo se prepara una sopa de fideos que haga de primero.
Por supuesto Emi y sus compadres no saben de estos placeres de pobre porque ellos se adoban y se cuecen en sus propios jugos.
No confundirlo por eso con Emilio el de los Botillos, un paisano que los andaba vendiendo por el Bierzo cuando empezaron a terminarse las matanzas tradicionales. Sólo se parece a Emilio el de los Botines en el nombre de pila y en que los dos tratan con chorizos y con culares, pero de cerdos de distinta especie y familia.

Para todos rige, no obstante, el hecho de que el culo castellano viene del kolo griego.
Ellos no embuten carne de gorrino con pimentón, sólo salchichas, lukánika, y salchichón o salami, pero tienen chorizos y culares, ¡milagros de la alquimia chacinera moderna!.

* Milito y los Kolokapitalistas es un grupo de música punk que caga en directo sobre el escenario y vende los boñigos después del concierto a los fans, muy numerosos y acérrimos, que puedan pagarlos al contado con importantes descuentos, o en cómodos plazos mediante financiación y el regalo de un orinal  de perzolana con la foto de los culos de los miembros del grupo, al finalizar el pago del último plazo.
Un recurso imaginativo para ir tirando en tiempos difíciles en que no se vende una mierda. De todos modos, ¿cuándo vendieron otra cosa?.

Seguiremos informando.

Yasas, salud!

Txantxo Gorri Nako.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Eliés, olivas



Eliés kalamón, Olivas de Kalamata
Grecia 2011


Las aceitunas negras de Kalamata completan con el tomate, el feta y el  pan el cuarteto de nuestra comida griega más básica.

Tienen el color del vinoso mar de Homero.

Sólo faltaría el aliño, pero podría ser prescindible porque el queso aporta sal y  grasa, y las olivas aceite y un punto de acidez vegetal parecida al vinagre.
Mi muhé desayuna una ensalada sin aliño. Yo les suelo añadir sal, aceite de oliva partheni, vírgen y orégano, la aromática más usada en la cocina griega.

Los olivos han sostenido a los griegos durante milenios, por eso los incendios, tan repetidos, son para ellos una doble tragedia. Es el árbol totémico de Grecia y de Atenas, el de la diosa Atenea, la de los ojos glaucos, como los de la lechuza, el otro totem de Athina.

El color verdiazul, plateado, del olivar es más griego que su bandera.

Feus prefirió el olivo, que le presentaba su hija Atenea, al caballo de su hermano Poseidón, como regalo para los hombres, en una especie de competición olimpica, del Olimpo y de Olimpia, algo deportiva.

Cuando la utilidad se une al mito, como es el caso, el glauco mar de los olivos debe preservarse a toda costa, porque de ello depende la vida de muchas personas. Más que la mía, engolosinada en estas olivas riquísimas, carnosas, pura gloria para un sibarita pobre, y para un rico.

Salud, yasas!

Skylorómiros.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Tirí, queso


Tirí, queso
Evia, Eubea, agosto 2011

El tiri feta es el tercero en discordia con el pan y los tomates.
Pero el de la foto es un pseudomizitra de Eubea que no está tan bueno como el de Kalíkratis en Sfakiá, Creta, que comíamos en Frankokastelo. Y el mizitra es el queso de Creta.
Sin embargo éste, un poco soso, está muy rico de postre con miel, otro producto estrella de Grecia.

Tiene cierto parecido con el Pata de mulo de aquí, el de Villalón de Campos y el  de Burgos fresco, y otros, pero más rico, más mantecoso y  menos "setón". En el corte se puede apreciar y en el aspecto granulado de la parte superior de la pieza que se nos ofrece.
El mizitra puede llevar una o dos leches, oveja y cabra, y al que nos referimos es al más fresco. Para que sea fetén, si es posible, que apenas tenga forma, que esté un poco grumoso, de un día o dos que, naturalmente, casi sólo puedes comprarlo al paisano que lo hace si lo encargaste antes o tienes suerte, que era lo que nos pasaba en Creta.
No son malos algunos envasados. Siendo frescos si presentan una fecha de caducidad corta, suele indicar ausencia de conservantes, pero los frescos lo son por eso precisamente, cualquier envasado, el plástico sobremanera, les perjudica.
De hecho perjudica a todos, frescos, semicurados y curados, el queso es un ser vivo al que no conviene amordazar sin que se nos afuegue.

En otro momento os presentaré el feta que, así en la foto, no parece tan distinto, pero no olvidemos que entre la vista y el gusto no siempre hay sintonía.
El feta es el rey de los quesos griegos pero veremos aquí, si el tiempo acompaña, otros que sin ser tan conocidos y mucho menos consumidos, no le van a la zaga en sabor y, con frecuencia, lo superan. Lógicamente todos los curados son más fuertes de sabor, otra cosa es su calidad.

Los quesos son una de nuestras pasiones.

Es de interés constatar cómo las pequeñas industrias agroalimentarias, familiares o cooperativas de todas las regiones e islas de Grecia, se esfuerzan por sostener una actividad semitradicional, a partir de productos comarcales de calidad, que surte a la población, mantiene cierta actividad económica y de empleo y promociona el sello local.
Eubea no es una escepción y comimos frutas, verduras y hortalizas de la zona, quesos de la isla, olivas del pueblo, de Maquis, más pequeñas, pero que no desmerecían en sabor a las de Kalamata, miel y orégano de sus montañas y bebímos vinos corrientes y más finos, todos de la tierra.

Por descontado la invasión de artículos foráneos en la mayoría de las áreas comerciales es imparable, como en cualquier lugar del mundo, pero aqui menos, aunque el lugar común repita que no producen nada, no olvidemos que nos encontramos en Grecia, un país de resistentes, como ya dejé dicho. También en esto.

Que aproveche. Aquí tenemos, cómo no, para quien se lo pueda permitir, una verdadera legión de buenos y grandes quesos. No son tan caros si preside la mesa la frugalidad, sin llegar a la del clérigo Cervatana claro.

¡Salud, yasas!

Barbarómiros.

Enmanuil Roidis -4


Seguimos con los Paseos por Atenas, traducido por Carmen Vilela. Los artículos de prensa, la mayoría publicados, ensayos y estudios, van de 1866 a 1901.
Algunos de los Relatos de Siros, por sus temáticas y la mayor templanza en la crítica que la Papisa, parecen anticipar otros aparecidos aquí, a pesar de que estamos ante una obra más ensayística que de ficción.

El azul de la foto que ilustra la 1ªcita no es al que se refiren Roidis y Byron, "teñido de añil, bajo determinadas condiciones atmosféricas". Pero es que Roidis, mencionando el piropo que los escritores antiguos dedicaron a Atenas, La coronada de violetas, dice, "pero no parece que pueda ser llamada violácea con igual precisión".
Del mismo modo las condiciones atmosféricas modifican ese azul  griego profundo, como aquí, una mañana radiante de sol con el Meltemi estremeciendo la superfie del mar y aclarando el azul con el brillo de miles de olillas que el viento levantaba. Sólo estaba empezando a soplar.

El Egeo, soplando el Meltemi
Grecia, agosto 2011

- ... "el mar de Grecia adquiere un color que escandaliza mirarlo. Ese ´mar azul` como lo llamó Byron". (Esta y la siguiente, de El arte pictórico en Grecia).
- "Si esceptuamos el oficio de barbero no existe entre nosotros otro más fácil que el de escritor".

Habla en algunos artículos posteriores, a lo Demetrio y Longino, del buen gusto o , "el sentir racionalmente las bellezas del arte y de la naturaleza", de cuestiones artísticas, de la sensibilidad y el conocimiento racional, de medicina... En  La dieta más conveniente a la inteligencia, cita al doctor Sangrado del Gil Blas de Santillana. Y hay más referencias a España. Recuerda, en Manual de narrativa,  "el canon conocido por todos, español según se dice, de las doce tríadas", y,  "otra clasificación y división -también española si mal no recuerdo- en los siguientes métodos descriptivos: a) El botánico, b) El zoológico, c) El mineralógico".

Sobre el tema de la Xenolatría griega y el Filohelenismo es bastante sarcástico y claro, en Crónica, pero sobre ello quiero tratar más en extenso en Alfabetos, en otro momento, e incluiré entonces las citas pertinentes. Y sobre la Iglesia y las brujas, asunto de su competencia, tengo varias, en  Las brujas de la Edad Media :

- "Pero la Iglesia había declarado una guerra implacable a la ciencia de ahí la feroz persecución contra la Bruja. La mujer, al dirigir una amorosa mirada a la Naturaleza, se convirtió en la madre de todas las ciencias". (En tres meses quemadas vivas 7000 en Tréveris, Prusia, 1500 en un día en Ginebra...).
- ... "contra el embrutecimiento moral que impuso la Iglesia, sólo la mujer se atrevió a sublevarse".
- "La máxima de Hipócrates que aplicó la Iglesia : todo lo que no pueden curar los fármacos lo cura el fuego". La Bruja "recibió como únicas recompensas brasas olvido y desprecio". "Como protesta por esta injusticia -el olvido y la caricatura histórica de la bruja- yo he arrojado una flor sobre el no llorado recuerdo de la salvadora de la Civilización" (frase final del estudio, publicado en 1868).

Y, pese a todo, a su anticlericalismo, la actitud conciliadora, comprensiva de Roidis frente a la superstición o la creencia religiosa, en Los espectros de la Edad Media : "... alegres criaturas de la lozana fantasía de los antiguos, a las que Sócrates acogía con una sonrisa por considerar indigno de un filósofo combatirlas con una sabiduría pedante y vulgar, según decía -en Fedro, de Platón-".

No me resisto al comienzo de La fiesta del asno en La Edad Media : "Platón definía al hombre como un animal bípedo y sin alas hasta que Diógenes desplumó un gallo y lo presentó como modelo del  hombre de Platón, obligando al filósofo a añadir a su definición ´plantígrado`. Los naturalistas posteriores, tratando de delimitar aún más la diferencia entre un gallo sin alas y un hombre, añadieron el adjetivo ´omnívoro`. Los filósofos, ´racional`, de tal forma que el hombre poco a poco se convirtió en un ´animal bípedo, sin alas plantígrado, omnívoro y racional` ".
En el mismo estudio, el hombre, para Roidis es un "animal racional que tiene una incontenible propensión a desvariar".

Y hay otra alusión que me interesó en Las brujas, "una planta maldita y maloliente...le dio una infusión a su hijo asmático...La tos se calmó". Creo que se refiere a la misma que causó algún estrago serio este verano y que nosotros fotografiamos en Grecia en agosto, colgada aquí en la etiqueta Perdío con el título de Plantas del margen. Stin perivoli tis Panagias, En el jardín de la Virgen...

Antes de terminar con las últimas citas, y desde mi desconocimiento del griego, quisiera despejar dos mínimas dudas que me surgieron en la lectura.
Habla, en Su primer duelo. Recuerdo ateniense, de "las setas de Dafní, comparables a las que se crían bajo los castaños de Liguria" y, a continuación,  "cómo es posible que este suelo del Ática siga produciendo tubérculos que en nada desmerecen los celebrados hace venticinco siglos por los dehipnosofistas, y al mismo tiempo produzca hombres tan faltos de sensibilidad que prefieren las supuestas setas cultivadas, o mejor dicho, fabricadas en los estercoleros subterráneos de París, que son secas e insípidas?"... . La duda es, ¿no se estará refiriendo en realidad a las trufas al llamar a las setas ´tubérculos`?, y ¿es  problema del autor o de la traducción?. La segunda duda se refiere a un cierto anocronismo, en Los esclavos romanos y el cristianismo, donde un esclavo le dice a otro, "¿Cómo podríamos mantener este tren de vida siendo libres? Aunque el humor de Roidis explicaría la licencia.

Restos de una taberna en Plaka -2
Atenas 2011

Sobre la juventud del país, pensando en su reciente independencia, dice "todo en Grecia es de ayer", nuevo, y en Atenas, "el árbol más antiguo del Ática es el plátano calvo de Kifisiá". Y, "las casas más antiguas son las ruinas de Plaka, de hace aproximadamente sesenta años". ¡Como ahora!, es sorprendente, nada parece cambiar, salvo las apariencias. Vamos terminando.

- "Pero preferibles mil veces a los bostezos los suspiros", (en Génesis de la pasión o Patogenia).

Y, en La oratoria política en Grecia, dice de su compatriota el heleno : "..., incapaz de imponer a sus representantes la defensa del interés de la mayoría, y no de unos pocos. Dispuesto a tragarse cualquier señuelo sin que la experiencia le haga ser sensato;". Y el diagnóstico final del griego: "En fin, un chico inteligente y noble, pero incapaz de madurar".

Estamos convencidos de que, en algunos casos, exajeraba, pero...
Salud, yasas!

Ramiro Rodríguez Prada.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Enmanuil Roidis -3


Paseos por Atenas, ensayos y estudios históricos, 2008, la más voluminosa, es la tercera entrega de Roidis publicada por la Universidad de Sevilla, con traducción de Carmen Vilela. Contó con ayuda del Ekemel, el organismo griego de traducción, el trabajo se realizó en los veranos del 2007-2008  en la Casa de la literatura de Lefkes, en Paros. El añadido de Ensayos y Estudios hitóricos se debe a que Roidis era un especialista en algunos temas de la Edad Media, como el de las brujas, y  les dedica algunos textos.

Pensé que, en lugar de hablar de la obra,  muy amplia y diversa, sería mejor daros a conocer una pequeña selección de citas que apunté mientras leía. Esto no sustituye al libro, demasiado jugoso para admitir un resumen corto, pero sí puede daros una mejor idea que mi descripción, que vendría a ser una reseña admirativa y poco más.

Casa en Plaka
Atenas 2011

Las citas hablan, sobre todo, de Grecia y los griegos y de Atenas y los atenienses, si bien sus alusiones en el libro son muy variadas y abarcan infinidad de países y saberes, siempre con un conocimiento enciclopédico, extenso y minucioso de los temas que trata. Consigue, lo que es muy difícil en un erudito como él, no resultar nunca pedante.Y eso que frecuenta lo peregrino, o será por eso, la Papisa Juana es el mejor ejemplo de ello.
Ahí van:

- ..."la policía  seguramente no compartiría mi opinión de que las aceras están destinadas a la libre circulación de los peatones". (Esta y la siguiente son del artículo, En las tiendas de objetos de cristal y loza).
-..."vegetar...para gozar de ese bendito estado que Séneca llamó calabacitis". Apokolokinzosis, término intraducible que hace referencia a la decadencia intelectual, según nos cuenta Carmen más adelante en nota al titulado, Sobre la dieta más conveniente a la inteligencia.

- "La verdad es que el griego no simpatizan con las plantas, a escepción de las que le son rentables". (Esta y las dos siguientes en, Los alrededores de Atenas).
-... "esos días soleados de invierno que son el mejor regalo de Dios a los atenienses".
-... "los atenienses, célebres desde los tiempos de los apóstoles por su gusto por las novedades". En nota se nos informa que según san Pablo a los griegos les gustaba lo desconocido, por eso habló del ´Dios desconocido` al desembarcar en Falero.

-... "las gallinas que se venden en el mercado, muy caras, y más flacas que un asceta de la Tebaida" (Esta, que habíamos citado en Gallinas siracusanas, y la siguiente de, ¿Qué comen los atenienses?).
- "El almuerzo obrero: pan recién hecho, un trozo de queso blanco encima de una hoja de parra, un tomate rojo, un refrescante pepino, un racimo de uvas...".

-..."quizá la serpiente no hubiera conseguido engañar tan fácilmente a Eva si esta hubiera sido griega". (Esta y la siguiente en, Dumas en Atenas).
- El perro..."que se complace en la coprofagia, como el profeta Ezequiel".

- "Oftalmofagia", comer con los ojos (Esta y la siguiente en, Diario de un compatriota).
-... "si lo usaba de semental -a un pretendiente- corría el peligro de que las yeguas pariesen mulos".

- "Entre las cualidades del campesino griego hay que contar su absoluta indiferencia por todo aquello con lo que no tiene nada que perder ni que ganar" (Esta y la siguiente en, El recluta).
-... "exceptuando al camello, no existe una figura más frugal que el campesino griego".

...porque les gusta así!?
(Parece ironía de Roidis)
Grecia 2011

Como tengo bastante para otra entrega y me falta tiempo voy a dejarlo aquí por ahora. Espero que la próxima sea la última. Roidis, sacándole punta a los detalles, con agudeza y humor del bueno.

Yasas, salud!


Ramiro Rodríguez Prada.

jueves, 15 de septiembre de 2011

Enmanuil Roidis -2


Los Relatos de Siros, también publicados por la Universidad de Sevilla, otra buena traducción de Carmen Vilela, -hablo desde el castellano, debo insistir en mi griego skiládiko, perruno-  de un extraordinario escritor como Roidis, fino y estiloso, nos muestran a un autor en la plenitud, más moderado en sus sátiras pero dominando como un maestro otros registros del humor, como la ironía, la farsa amable, y un añadido de ternura, de hombre ya sabio, que no estaba tan presente en la Papisa, a pesar de su idilio con la protagonista, Juana, de su amor por el personaje que también citaba Durrell en el prefacio de su traducción.

Nuevo Aristófanes
Los figurines de Faliro

Da inicio al conjunto de cuentos, fábulas, ensayos, el titulado  Mentalidad del marido de Siros, magnífico retrato, muy avanzado de ideas para su tiempo, de la sociedad burguesa siriota, que ya habíamos leído en traducción de Natividad Gálvez para Alfaguara en una Antología del cuento griego (2005), la más ambiciosa de las que se han publicado aquí y que se abre también con el cuento de Roidis.
Terrible, desolador, El lamento del enterrador, en una sociedad como la griega siempre dependiente de un clientelismo político, cuando menos chocante, aquí trágico, que siguen denunciando sus escritores de hoy.

Relatos humorísticos y críticos, pero también inocentes, algunos casi infantiles. Y las agridulces fábulas de animales, tomando a estos como ejemplos mejorados de la conducta humana, las historias de un caballo, un perro, una gata, un corral..., son enternecedoras y a veces tremendas, dramáticas.
La vida mundana, las vedettes, los teatros, la ópera, el cospolitismo, el exotismo, pero también esa tristísima Carta a la Virgen de un niño, contado por un escéptico pesimista como él. Y no renuncia  al sarcasmo, en ocasiones, o a la argumentación falaz, disolvente y especiosa, como en Ayios Sostis, el Monólogo de un hombre sensible o  Las ventajas de la enfermedad, como un sofista moderno.

Hombre de una amplísima cultura y un lenguaje rico, la kazarevusa no habrá facilitado la labor de la traductora. Moderno en sus ideas pese a su procedencia social burguesa, no deja títere con cabeza en sus análisis de la sociedad griega de su tiempo, incluído el pueblo llano, pero siempre con esa admirable mezcla de terneza, ironía, sencillo didactismo y calculada burla. Con cariño y tacto. Y una vasta erudición  sin alardes, que no molesta, en un desarrollo del relato vivo y entretenido. Discursivo, observador y reflexivo, más que dialogante, intuitivo o complaciente en su escritura, siempre es un placer y una diversión leerlo.

Y os dejo con una cita de Ayios Sostis, uno de mis preferidos, por la sofística desplegada, aunque el texto es sólo la conclusión de ese azote de utópicos y decálogo de descreídos que es el cuento, el despliegue de argumentos y su encaje es lo que lo hace sabroso. Y su nihilismo feroz.

Burgos  2007

"La juventud, la ignorancia, la total renuncia a la reflexión acerca de nuestro destino, el trabajo físico y la reducción al mínimo del trabajo del cerebro son las únicas cosas capaces de mermar la desdicha, ligada a la existencia humana".
"Tira al mar a Leopardi, y con él a todos los filósofos y poetas, excepto a Homero, Anacreonte y Teócrito, y en lugar de fantasmas metafísicos o científicos, caza conejos o persigue mujeres, corre, monta a caballo, navega, siembra lechugas o corta madera, esfuérzate físicamente y reposa espiritualmente para que se retrase la hora en la que, siendo consciente del sinsentido de la vida y la vacuidad de toda esperanza, disfrutes un profundo e interminable sueño y como yo, grites: ¡Ah, Nirvana!".

Salud, yasas!

Ramiro Rodríguez Prada.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Enmanuil Roidis



Grecia 2011


Roidis nació en 1836 en Hermupolis, la ciudad del trapichero Hermes, capital de la rocosa isla de Siros y de las Cícladas, la más poblada del archipiélago y principal puerto de Grecia en el S.XIX. Cuenta con edificios públicos y mansiones neoclásicas de armadores y  prósperos comerciantes siriotas. El primer teatro de la ópera levantado en Grecia, el de Apolo, a imitación del Scala de Milán y el edificio neoclásico del Ayuntamiento (1876) construido por un conocido nuestro, el arquitecto alemán Ernst Ziller, autor en 1881 del Palacio de Ilion en Atenas, residencia  del arqueólogo Schliemann, que en la actualidad alberga el Museo Numismático. En Arquitectura hablamos de ello, en La cueva de Alí Babá.

De familia acomodada y viajera, el escritor vivió en muchas ciudades y paises. Estudió en Francia y Alemania. Vivió en Italia y en Egipto, El Cairo, Alejandría. Anglófilo y angloparlante, políglota, escribió la casi totalidad de su obra en kazarevusa, antes de la normalización del griego moderno en el actual demótico.
Republicano y anticlerical, es conocido sobre todo por su única novela, La Papisa Juana, la historia del Papa Juan VIII, en el S.IX, la sacrílega ¿leyenda? medieval acerca de la presencia de una mujer en la sede vaticana de San Pedro, en la que habría permanecido dos años y medio, antes de parir.
Los últimos años vivió en Atenas, a la que dedica muchos de sus  relatos y crónicas. Fue varias veces director de la Biblioteca Nacional en los gobiernos republicanos de Tricupis, pero era inmediatamente depuesto por los monárquicos.

En 1904 murió en la pobreza, el sarcasmo habitual de nuestras indigentes, en lo cultural y demás, sociedades. Cómo olvidar la amargura, que pasa por broma inocua, de alguna de sus ironías, "...una ventaja grande del ateniense, pero también impuesta, es la frugalidad que lo caracteriza", o "El caldo se ha aguado, los bistec se han hecho casi transparentes".


Restos de una taberna en Plaka
Atenas 2011

Hay un retrato literario del último Roidis, robusto, barbado, entrando en las tabernas, respetuoso y un poco ajeno al mundanal ruido a causa de su sordera, o paseando las callejuelas de Plaka, frecuentadas por él y donde era muy popular, que recuerda Lawrence Durrell en un prefacio a su adaptación inglesa de La Papisa Juana.

La novela, de 1886, había sido editada aquí por Edhasa en 1977, traducida por Estela Canto a partir de la traslación inglesa realizada por Durrell del griego en 1954. Ahora contamos con la primera traducción directa, de Carmen Vilela, editada por la Universidad de Sevilla el año 2006.
Lawrence, en su prefacio, califica a La Papisa de "pequeña obra maestra de irreverencia, ingeniosa y, en parte, un poquito indecorosa", nos salió ligo mojigato aquí el inglés, quién lo diría.
Lo cierto es que el libro fue prohibido y su autor excomulgado por la iglesia ortodoxa, como le pasaría años después al compañeru de etiqueta de Roidis aquí, Nikos Kazantzáki. Y eso que La Papisa lo era de Roma, no de Constantinopla. Pero al final todos los fanáticos se juntan en la Gran Iglesia Universal de las Verdades Eternas, aaagg, Persefoni mu!

Durrell pone en duda que otras obras del siriota merezcan la traducción y lo califica de "hombre de un solo libro" y, una vez más, Larry se equivoca. Da la impresión de haber leído poco más que la novelita. Los Relatos de Siros y los Paseos por Atenas, también traducidos por Carmen y editados en la Universidad sevillana, son una maravilla. Hablaremos de ellos en los siguientes capítulos.
El prefacio y la traducción de La Papisa Juana los dedica Durrell al pintor griego Yorgos Katsímbalis, el Coloso de Marusi en el libro de Miller, el más carismático de ese grupo grecoinglés de los años treinta. El pintor le había recomendado en 1939 que leyera La Papisa que, según él, "Es un típico libro pícaro, un libro griego, lleno de buena gracia, mal gusto, risa e irreverencia".

Roidis, un estilista del lenguaje y un caballero, invocaba con frecuencia al lector clemente, esa misma clemencia pedimos nosotros para lo escrito y lo que resta.
Salud, yasas!

Ramiro Rodríguez Prada.

martes, 13 de septiembre de 2011

Buevos atróficos



Agii Apostoli
Eubea, agosto 2011

Decíamos en Buevos de dragón que las gallinas son animales carentes de imaginación y, en lo chechual, lo mismo les da un gallo, un buitre o un porrón, no saben ehtinguí. A saber qué comemos, porque no sé cómo se las arreglan para que todos los huevos sean del mismo tamaño, aunque eso son ya imposiciones anatomicofisiológicas, evolutivas: sólo se puede dilatar hasta cierto punto.

Hablamos de la incomunicación entre seres humanos y ponedoras en esas cárceles modernas para aves, de la imposibilidad de una atención personalizada. Pero debemos disculpar a los cuidadores porque no hay cosa más salvaje y más tonta que las 5000 gallinas de un gallinero de la era democrática. Son cinco mil, 5000, papanattas reunidas que no paran de dar explicaciones, siempre sobre las mismas gili-polleces. Conversaciones más simples que un posavasos. Que si me creció la cresta, que si me recortaron el pico, que si me escuece el culo. Son unas sinsontes y no se les puede prestar atención porque, encima, se creen algo, tienen la misma estúpida presunción de sus machos naturales los pollos, los gallitos.

Cuenta Roidis una historia, de las varias fábulas de animales que tiene en Relatos de Siros, sobre una gallinita y su gallo que anda a picos pardos tirándole los tejos a una Hortelana, de otra raza. Se titula Una historia de corral, es una delicia, hay que leerlo. Pero era una pareja en un gallinero de pueblo donde los huevos llevan la impronta amorosa, el soplo creador.
Yo mismo escribí  hace tiempo un cuento titulado Machito Follador, de una serie de ellos sobre el Mediterráneo oriental, ´27amaneceres y un poema (al oeste de Anatolia)`, que es como decir al oeste del este. Lo menciono porque tal vez lo incluya aquí un día. El Machito, un gallito muy peleón y braguetarápida, reinaba también en un gallineru de aldea donde la libertad y amplitud de espacio reduce considerablemente el estrés y la tontuna de unos bichos ya de por si muy cortos de entendederas, por una incapacidad innata para la ideación y ligazón coherente de dos o más imágenes.

Grecia 2011

Al buevo. No son sólo los transgénicos, las hormonas, los abonos químicos y pesticidas, los escapes nucleares, la contaminaçao atmosférica, marina y terrestre, etc. Con todas estas cosas que pasan por normales, estamos incubando una raza de fenómenos husserlianos sin ninguna esencia pura en la conciencia, insípidos e insubstanciales, si no nauseabundos o sartreanos.
No prestamos la debida atención a las intuiciones primordiales y nos tragamos los buevos crudos sin mirar: un agujero en un extremo y otro en el opuesto y a chupar. Pero no sabemos lo que sorbemos

Todo está interrelacionado y cualquier día mutamos y en lugar de follar sanamente ponemos huevos XXL al cuadrado, muriendo vírgenes. Creo que ya se dieron casos, en alguna sinagoga ultrasionista, en varias medersas fanáticas y, sobre todo, en residencias de seminaristas y postulantes cercanas al Vaticano. No se sabe porqué se ceba en estos colectivos en particular.
Gallinas sicilianas, jerarcas vaticanistas, Siracusa, Roma..., Italia en el punto de mira, que se prepare Ler busconi. Él dice que los buevos ya los tiene bien puestos y colocaos, ¡habrá que verlo!.

Y para terminar diremos que ni siquiera  los corrales tradicionales son capaces de dar lo que Natura niega. La carne y los huevos de estas aves, menos histéricas, son incomparablemente mejores que los de granja industrial, pero la inteligencia de las gallinas no crece en igual medida. Las superdotadas lo más que consiguen es ser madres, y pasar también con ello de la potencia al acto aristotélico, del óvulo al pollo.
Pero hasta en la maternidad son estúpidas, es fácil, sin ser un cuco, cambiales los huevos y pueden incubar tan panchas hasta el buevo izquierdo de Colón, que era atrófico, ¿o era el derecho?.

¿Qué monstruos no pariremos?

Yasas, salud!

Korvus Korax, O Mavros.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Buevos de dragón



Agii Apostoli
Eubea, kalokeri 2011

El otro día, revisitando cosas de Gila, me volví a reír con sus chistes, siempre. El de los peces, las pirañas, que metes la mano y sacas el muñón, o vas al banco con un discurso y te lo dejan en un refrán, o el del caco que se pone enfermo y todo lo que roba lo devuelve, inolvidable Paco Gila.
Dicen las malas lenguas que en el 68 se exilió para eludir una paternidad no reconocida. Sea o no cierto, en Buenos Aires editó la revista satírica  La gallina, que es adonde quería llegar.

Al dedicar nosotros doce puestas en Desde la popa (De Malta a Siracusa), no lo hacíamos como homenaje a Gila, que apareció ya en estas páginas mucho tiempo después y no llegó a palpar el culo a las Palurdas, ni a meter el dedo en el de las Papanattas buscando el buevo prematuro. No. Era la expresión usada por el padre de Alberto, el Capi del Teach, Más putas que las gallinas de Siracusa, que también habíamos oído nosotros en alguna ocasión.

Después de varios meses de tocar los buevos a las gallinas, es decir "de" las gallinas, en sentido literal, da igual... dejádlo, es imposible desenredar el equívoco.
Pues bien, tras un trimestre de toqueteo buevil creo que aún no hemos podido desentrañar o, mejor, desvelar el misterio que encierra la expresión, y sospecho que la explicación que el padre del Capi les dio fue sólo una respuesta cachonda para salir del paso. Porque, eso de que  las gallinas eran tan reputas que hasta  habían aprendido a nadar para interactuar con los patos no resuelve el enigma, el porqué del puterío desmedido de las gallinas siracusanas, sólo refuerza la idea de lo putísimas que son, o eran.

Agii Apostoli
Eubea, verano 2011


Lo cierto es que nos hemos enredado también con los patos y otras anátidas, fijas o de temporada, intentando recabar información sobre estos hechos, o habladurías, a saber. Algo hay, sin duda, porque son incontables los testimonios al respecto como habrán podido leer aquí quienes estén al tanto del asunto. Las Palurdas y Papanattas insisten en que son infundios y los ultratifosis que se trata de un contubernio grecoespaniolo.
¿Que dicen los gallos siracusanos? Que a ellos lo que les sobran son gallinas, que pasan del gallinaio y del pollaio tradicionales y que veranean en Mykonos, donde hay más pavas espaniolas que en Ibiza. Bueenooo.

Así que a nadie le interesa ya la procedencia o raza de los huevos que consume, o la especie de gallina  que se coció en el caldo que nos quita el resacón o simplemente nos recuerda a nuestra abuela. Y eso que dicen que, con el triunfo de los cocineros españoles y la neococina, sabemos más y comemos mejor. ¡Serán los familiares y amigos de los cocineros y los que puedan pagar sus platos!

Recordemos que el sibaritismo no está reñido con la sencillez, ni siquiera con la humildad y la frugalidad, todo lo contrario. Pero la mayoría desayuna patatas, come patatolas y cena patatas solas, para variar, como bromeaba mi padre sobre el hambre de posguerra. Y no ven una gallina en su vida como no sea en la caja del avecrem, ¿o era starlux?.
Vale, vale, exajero porque, ¿qué más democrático que unas pechugas de pollo y unos buevos de cualquier manera?.
Sin embargo se echa en falta, además de la pela, el buen gusto: no sabes si comes pollo o lagarto y cuando pones el huevo en la sartén miras en el interior de la cáscara para ver dónde quedó el otro medio. De cualquier manera un huevo frito siempre parece medio en el plato, y si es roto o estrellao ni eso.

A lo que íbamos. Pocas personas se paran a reflexionar sobre la calidad de lo que comen. Crían a esas gallinas clónicas en gallineros horribles, cárceles de animales, en esas jaulas metálicas individuales horrendas que son las celdas del mundo gallinil, donde sólo pueden comer, cagar y poner huevos. Óvulos degenerados, buevos sin substancia aunque nazcan con música ambiental, La carga de la caballería ligera, La sinfonía del nuevo mundo o los cuatro tenores, ¡tiene huevos que le pongan Bach a las más ponedoras!.
Unos buevos, en fin, insustanciales, como lo que comen. Y faltos de espíritu porque no ven jamás a un gallo y conciben, no, ovulan pura ficción especular, mirando a los ojos del que les echa el pienso, que será un buen hombre, si lo es, no lo dudo, pero que no puede andar con sutilezas en el cacareo infernal de un gallinero industrial.

Falta amor. Allí a nadie se le acurriría llamar ¡Pitas, pitas! a las gallinas, con cariño, como cuando se les echa unos graninos de maíz o se les acerca una berza para que refresquen y hagan mejor la digestión, en los corrales familiares. Es otra manera, no hay color.
¡Música..., venga ya!, comunicación interespecies y buen trato hacen buenos buevos. Eso que comemos lleva el gérmen de la imaginación gallinesca y todo el mundo sabe que son los seres menos dotados por la naturaleza para la fantasía.

Cuando nos apriete la rabadilla ponemos el siguiente.

Salud, yasas!

Korvus Korax, O Mavros.