viernes, 2 de septiembre de 2011

Domates, tomates



Los reyes del mambo

Grecia, agosto 2011

No sé la variedad, los supongo híbridos de los más comunes, me dejaré instruir por Pacho, que es mi colega especialista en estos asuntos y Gran Tentador de melones de Villaconejo, título que ostenta desde el año 2000, ininterrumpidamente (menos un año que no hubo por...lo que zea, ea!) hasta nuestros días, pero lo que sí sé es que a estos tomates había que cantarles una saeta antes de comerlos, ¡Virhen santa de la Rinunsiasión! ¡Óle, Óle y Óooole!

Engordé cinco kilos y tengo más tomate que sangre en el cuerpo.

Fueron, un año más, los niños mimados de todas y cada una de las comidas, cenas o desayunos que hicimos.
Pero no traje semillas para Pacho, los suyos asturianos y de otras razas, ahora, están tan buenos como estos. Pepe Pirrúla, el Picabrotos, les dedicó el año pasado más de una tonada, unas mineras.

Me sumo con unas toses de alegría.

Yasas, salud!

Barbarómiros.

No hay comentarios:

Publicar un comentario