domingo, 27 de noviembre de 2011

Apodromos -2


Grecia 2011

Le cojo prestado el nombre de batalla a Giannis Tzakós para colocar otro par de fotos que tengo de este verano con el mismo motivo, un contador de la luz.  Aún se esconden por ahí algunas más pero estos tres contadores, -sumando el de la entrada anterior-, estaban en el camino que recorríamos la primera semana 6 u 8 veces al día.
Queda pendiente tal vez una tercera entrega, pues.

La blancura de la cal y la fuerza de la luz casi hacen desaparecer la pared, salvo el nicho, claro, y yo soy un fotógrafo aficionado y un tipo demasiado inquieto. Algunas lecciones de Andrés Edo, a través de sus fotos, también aprendí en esto.

Se me ocurría pensar en la parea, los amigos de Agioi Apostoloi y en que tal vez alguno las viera.
Me van a echar del pueblo por no poner ni una sola fotografía de las preciosas playas que tienen, cuatro a falta de una y varias más, próximas, todas de arena y de aguas cristalinas.
En realidad sólo he hablado maravillas de ellos, que son las que nosotros hemos vivido, en particular la cercanía  y el cariño de las personas.

Que duda cabe de que el mar y el sol son los atractivos principales de Limani Petrión, de Eubea y de Grecia entera y los quisieramos seguir disfrutando tanto como fuera posible, pero mi intención no es elaborar una guía turística al uso donde aparezcan todas las playas del paraíso.
Creo que ésta imagen también es real, sin llegar a la que nos presenta en blanco y negro, a otro ritmo y con verdadera dureza realista el cineasta griego Angelopoulos.
Esta tiene además al denostado hormigón por base, nada atractivo, lo sé, pero ahí está..., ¿será el feísmo lo que me motiva? ¡Hay que joderse, estamos todos majaras!.


Grecia, agosto 2011

Recuerdo a una mujer que me preguntó porqué fotografiaba algo parecido a esto que veis o quizá peor.
Le contesté que me gustaba y es verdad.
Veo su pobreza pero me resultan tan llamativos los contrastes, la luz, la blancura que gracias a su laboriosidad, la de los vecinos griegos, quién si no, se mantiene así en el rincón más humilde a base de manos de cal, veo la pureza de las líneas en la trama más común, gracias también a un sol envidiable que reverbera y se multiplica en los mil matices del blanco, del inmaculado al sombrío y hasta el gris, veo todo eso y flipo, que no es malo de suyo, como decía el padre Bonete.
Y medio cegato como voy estando.

Así de sencillo. Y no soy un flipao de comunión diaria, cuidadín, aprecio la huella de los tablones del encofrado en el cemento, algo nada sublime, por supuesto. Lo sé porque fui encofrador en Agromán antes que cocineru en Asturies. No se da aquí el blancor de la cal del que hablo, pero es que no todo en Grecia es Egeo y ahora menos.

En Arquitectura, (Casas -2), hay una fotografía de la entrada de la casa de la señora que me hacía la pregunta, supongo que no pudiendo creer en mi tamaño mal gusto.
Es un tejadillo nuevo con soporte de madera y dos jarrones de barro adornando el vano. Estilo rústico. Está bien, es guapo, pero sólo lo fotografié después de que se fuera i kiria, la dueña. No me gusta hacer la pelota, como mucho me atrevo a aplicar las enseñanzas del Magister Libérrimus, Dom Juan "Tenorio" Blanco, en su ´Tractatus de Adulatione`.
La buena mujer pensaría, "Están locos estos extranjeros", con razón. No creo que sepa que la foto de su casa circula por la red. Y si lo sabe se sentirá orgullosa.

Si ya este verano hice la tira de fotos jugando con esa maquinina que me regalaron, con un montón de funciones que no sé ni cómo se operan ni, a decir verdad, me interesan mayormente, si en la primera oportunidad ya me entretengo como un niño, cuando todavía tengo en mente lo que costaban los carretes y todo el rollo del revelado, etcs, etcs., ¡qué no haré, a este precio, repito, en lo sucesivo? ¡La Biblia en verso! (que ya intenté sobre la letra..., desistí.).
También es posible que me den la fatiguitas psilicosas y lo mande todo al carallo.

Hasta mañana, sabiondos.

Ramiro.

P.D. El consabido postre musical que me he buscado para estos capítulos, Psarandonis. Después del Sinnefiasmeni kiriakí, Domingo nublado, de Tzitzanis que coloqué en Geotropía (Geotermias), en la voz de Sotiría Belou, de la respuesta de Giannis con dos fotografías de Xalkida, su ciudad y capital de Eubea, perdida entre la niebla, Sinnefiasmeni Xalkida, me pareció oportuno este Sinnefiasmene ourané, Cielo nublado!, dedicado a estos dos amigos solitarios,

Giannis y Andrés
que conmigo
casi hacen tres 




Salud, geia sas!