miércoles, 8 de febrero de 2012

Una T para Tàpies


Una T para Tàpies
Acuarela, Oviedo 1985
Ramiro Rodríguez Prada

Ayer, hacia las once de la noche, cuando terminaba de escribir las últimas líneas sobre Manolis Rasoúlis, me enteré por la radio de la muerte de Antoni Tàpies. Incluí a última hora una mención a la triste noticia. Dos medio budistas, aquí, en días sucesivos, Amám Amám!

Una hora después entré en el fotoblog de Giannis Tzakós (apodromos) para ver su foto de hoy (en realidad la de ayer ya), comentarla y saludarlo. Para mi sorpresa Giannis había subido una fotografía que podía tomarse como un homenaje a Tàpies. Me extrañaba que ya se hubiera enterado y lo interpreté como una coincidencia, no puedo decir "feliz" por tratarse de un suceso luctuoso, pero sí asombrosa.

Mi primer comentario fue sólo,... Antoni Tàpies. Salud.
Giannis me contestó enseguida, I love Tàpies.

Sus fotografías ya me habían dicho antes que le gustaba Antoni. También coincidimos en eso. Parecía claro que no sabía nada de su muerte.
No me gusta dar estas noticias, y a nadie, pero tenía que hacerlo y le contesté, Murió hoy. Debí escribir Muere hoy, pero me entendió y volvió a responder.
Allí no habían llegado noticias, no sabía nada.
La elección de la imagen fue, en efecto, casual. Os invito a que la veáis aquí a la derecha en Favoritos, si os gusta Tàpies, al instante veréis el parecido, y a los que no les guste es medio minuto.

Todavía le envié un último comentario para aclararle porqué aún no había llegado a Grecia la noticia, (murió) Hace pocas horas.

Poco tengo que añadir porque no descubriría nada. No me importa que recibiera todos los premios de la panoplia artística burguesa porque los merecía y allá ellos si son masoquistas. Les mola, además, los chutes de realidad, por mostrenca que en ocasiones sea. Porque la obra de Tàpies, por mucho zen que se le quiera añadir, no se casa ni con dios. Pocas tan radicales en el último siglo.

De Carles Santos, una composición de 1979, con un vídeo humorístico, hay que sobreponerse y tratar de sonreír, si se puede, pese a todo. La-Re-Mi-La.


Y res més. Que tingueu un bon día!

Ramiro