domingo, 22 de septiembre de 2013

Ο Παύλος Μάτεσις, Pablo Mátesis


Ilustración de la cubierta, obra de un pintor popular griego.

Ο Παύλος Μάτεσις

Memorias de una hija de perra
Η Μητέρα του Σκύλου 


"Más vale que me llames Raraú.
Mi nombre de pila es Rubí, pero me bauticé como Raraú, sin más, cuando me metí en el teatro, y con este nombre he llegado hasta donde he llegado; en mi cartilla de la Seguridad Social he añadido Señorita Raraú, Cómica de la legua, y ése es el nombre que pondrán en mi epitafio."...

Así comienza su patético y enternecedor relato, Pablos Mátesis, en primera persona y entrando a matar desde el principio. De hecho la primera historia que cuenta es que acaba de comprar una tumba en Atenas donde enterró a su madre, que no quería volver a su pueblo provinciano, Villabrava, del que la echaron coincidiendo con la Liberación de la ocupación alemana por... razones que no debo desvelar.

"Mi padre era tripicallero de oficio, pero no lo confesábamos abiertamente. Se iba al matadero, cogía las tripas, las lavaba y las volvía del revés una a una para hacerlas a la brasa."

"Y un buen día, durante la Ocupación, cuando estábamos a punto de batir nuestro propio récord, veintisiete días consecutivos sin pan, sólo hierbas,...". Pág. 12.

"Antes de la guerra acostumbraba a sentarse por las noches en el escalón de madera con su hermana, y cantaban las dos a dúo, ya fuese Tus ojos, esos ojos tuyos, o bien No malgastes tus lágrimas, no era más que una locura mía, una aventura pasajera."  Pág. 25.
(Τα μάτια, τα δικά σου τα μάτια Μην κλαις αναίτια ήταν μια τρέλα μου μια περιπέτεια μονάχα μια. Títulos griegos de esas canciones). 

Eldo di Lazzaro. Λεωνίδα Κατσουρόπουλου. Δανάη.  Τα μάτια, τα δικά σου τα μάτια (1937)


Las fuerzas de ocupación. Los alemanes:

"-...¡Dispara, cacho cabrón! Disparad también vosotros, les espeta al resto de los alemanes, todos ellos con el dedo listo en el gatillo. ¡Disparad! ¡So maricones! ¡Que os dais por el culo entre vosotros para no tener que mancharos con las griegas!! ¡Disparad! ¡Pero que conste que un día las pagaréis todas juntas! [...]. Pagaréis las consecuencias, no os creáis que os vais a ir de rositas."
-Desgraciadamente, señora Kanelo, [...], los alemanes no llegaron a pagarnos jamás. Ni entonces ni después. Y lo peor es que ni siquiera les pedimos que pagaran. ¿Es que no ves que ahora son nuestros fieles aliados y ellos se muestran condescendientes y permiten que nuestros hombres vayan allí a trabajar, que en las Naciones Unidas nos tienen a su merced? Se nos han subido a las barbas. Aunque venciéramos nosotros."
-¿Y para qué demonios vencimos, Rubí, [...], de qué nos ha servido la victoria, desgraciados de nosotros? Y se echó a llorar." Págs. 62-63.

Los italianos:

"A los italianos, en cambio, los mirábamos con buenos ojos, porque se reían, echaban piropos a las mujeres por la calle y, de vez en cuando, tiraban panecillos a los niños." Pág. 12.

"En el vecindario, algunos despreciaban a los italianos porque se metían con las chicas, y empezaron a hacer correr el bulo de que, al parecer, los italianos se comían las ranas. [...] Hoy en día es diferente, hemos progresado y encuentras ancas de rana en los supermercados más aristocráticos. Pero por aquel entonces, comer ranas era toda una ignominia."
"Los italianos comen renacuajos. Cualquiera diría que que no tenían todo lo bueno del mundo en sus cantinas." Pág. 72.

"...¡cómo permites que hombres que comen ranas te besen!". Pág. 73.

Los aliados. Los ingleses:

"[...]; eran rubios y sonrientes, pero clavados a los griegos en una cosa, también ellos tenían el culo caído." Págs. 66-67.
Σοφία Βέμπο.  Τα δικά σου τα μάτια (1939)

http://www.youtube.com/watch?v=B_OOvIFASFg


Foto de un retrato de Mátesis (no figura autoría) en la solapa interior de la cubierta.

El libro se publicó con enorme éxito en Atenas en 1990. Dice el texto de contracubierta, que en dos años supero las 25 ediciones. La española, de Seix-Barral, es de junio del 94.

Y algo sobre la traducción de Cristina Serna, en general digna desde el castellano. Como he dicho ya varias veces, no puedo valorarla desde el griego por mi escaso conocimiento del idioma. ¡Gracias por el préstamo!
Yo tengo muchos problemas con ese modismo que se convirtió en coletilla por los años de la Movidina y tanto finolis de la beautiful people del momento. Me refiero al como muy: "...era como muy vedette..." Pág. 145.
Se deja sentir también su lengua materna, la supongo catalana por el apellido paterno pero también por giros como "ni que sólo fuese/sea un momento" (Págs. 183 y 238, última frase del libro), por el más propio "aunque sólo fuese/sea ..."

Voy acabando con una canción escrita por Mátesis, también letrista.

Π. Μάτεσις. Σ. Ξαρχάκος. Ν. Ξυλούλης.   Πατρίδα χιλιονικημένη.


Y una última cita:

"...la tierra está hecha de tumbas." Pág. 237.

Ramiro Rodríguez Prada

Imperio Argentina.  Carceleras del Puerto.

http://www.youtube.com/watch?v=HhjTyd1otPE

¡Calla, cataclismo!...

P. D. Dentro de unos días el segundo capítulo.

Salud.