No hay color. |
Salía tirar la basura
para aclarar las ideas, pero se enturbiaron aún más. Lógico, ¿¡a quién se le ocurre!?, en una noche sin luna, con el cielo encapotado y en la esquina más oscura de la calle... . No fue suficiente que las bolsas fueran blancas o que llevara los ojos encendidos como bombillas de 100 vatios. Regresé solo y oscuro, sin nada en las manos, fundido contra el negro negro mundo.
Omar Kayan. Kiko Veneno. Guitarras, Tomatito y Raimundo Amador.
Salud y felices pesadillas
ra